lunes, 9 de noviembre de 2009

¿Arte o Folclore?














El arte popular se expresa generalmente en el término folclore. Folclore significa sabiduría popular; según el DRAE; Diccionario de la Real Academia Española; el folclore abarca todos los conocimientos que se trasmiten oralmente y todas las habilidades o técnicas que se
aprenden por imitación o mediante el ejemplo, así como los productos resultantes.

El folclore abarca todo lo popular: el arte, la artesanía, los útiles, los trajes, las costumbres, las creencias, la medicina, las recetas, la música, los bailes, los juegos, los gestos, el habla, así como aquellas manifestaciones orales que han sido calificadas de literatura popular, pero que responden más exactamente a la denominación de arte verbal u oral. Este último, que comprende cuentos populares, leyendas, mitos, proverbios, adivinanzas y poesía, ha constituido desde los orígenes de la especialidad el objetivo primordial de las investigaciones folclóricas, tanto entre los humanistas como entre los sociólogos y antropólogos.

En la tacita de plata aun se puede disfrutar del folclore, ya sea en las ventas típicas del primer domingo de mes en el Parque Central, o en ferias municipales.

Dulces típicos, ollas de barro, muebles de palo blanco, artículos hechos en textiles típicos, los tradicionales atolitos Quetzaltecos, son una muestra del gusto y del amor al arte Quetzalteco, que más que un arte se ha convertido en folclore.

No se trata únicamente de cómo nos enamoramos de los bellos colores de estos artículos artesanales, sino de cómo disfrutamos de sus exquisitos sabores, y de cómo se deleita nuestra vista al apreciarlos.

Por eso aprovecho esta nota para invitarle a ser participes de estas muestras culturales creadas y aun elaboradas en la bella Xelaju.


La Ixconda de Gallardo.


Para algunos lo irreal carece de significado, mas no es así para el maestro Manolo Gallardo, quien con 73 años sigue asombrando al mundo con sus maravillosas pinturas.

Ya sea utilizando el simple claroscuro o la maravillosa técnica del oleo, Gallardo logra darle poder al color creando diferentes matices que logran perfectas armonías dándole vida a distintos mundos que aunque sean irreales son capaces de sumergir nuestra imaginación a un mundo tan real, como en el que vivimos.

Manolo Gallardo Mansylla, pintor guatemalteco. Nació en 1936 en la ciudad de Guatemala. Su primera exposición fue en 1957 en el Instituto Guatemalteco Americano (IGA).

Estudió en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la Academia Artium, la Academia Peña de Madrid y en la Academia de San Carlos de Valencia, España.

Continuando con la obra de Gallardo hoy quiero compartir con ustedes una magnífica obra de las tantas de este gran pintor, se trata de la Ixconda, cuya pintura debo confesar provoca varios pensamientos en mi.

Este retrato de una mujer indígena engalanada del traje típico guatemalteco, muestra en su rostro; melancolía, un poco de tristeza y bien puede distinguirse una sonrisa fingida. También podemos notar que el vacio exterior es reflejo de lo que hay en su corazón, por eso algunos le llaman la Gioconda Amerindia.

Al contemplar esta pintura y observar la infinidad de matices utilizados por el autor, nos podemos sumergir en un mundo lleno de magia y color, en un mundo parecido al que se describe en el Popol- Vuh, lleno de colores y de personajes distantes, melancólicos, tranquilos, siempre en espera de algo.

En lo personal esta pintura me llama la atención, porque es capaz de trasladarme a la magia de los pueblos mayas; y es que desde siempre he vivido enamorada de la majestuosidad de nuestra cultura y es precisamente eso lo que el autor desea comunicar en esta obra; su amor por la gran civilización maya.

El toque único de este artista orgullosamente guatemalteco lo ha hecho acreedor de varios premios; desde 1954 hasta la fecha ha recibido más de 50 reconocimientos nacionales e internacionales. En 1995 recibió la Orden del Quetzal en grado de Gran Oficial. En el año 2000, obtuvo el premio Meritorio Plástica, Arco Iris Maya; y en el 2002 obtuvo el grado de Emeritissimum Universidad de San Carlos de Guatemala.

También ha participado en varias exposiciones personales y colectivas, entre ellas, la del Museo Regional de Chiapas, México; Museo Vaticano, Roma, Italia; EXPO 92, en Sevilla, Casa Do Brasil, Madrid, España, etc.

Atento tanto al detalle como a elementos de sorpresa, Manolo Gallardo se muestra a veces contestatario, irreverente, pero sin duda conocedor profundo de los temas que aborda.

La suma de su talento, imaginación y buen gusto da como resultado un surrealismo virtuoso, innovador e irreverente.

Manolo Gallardo es una muestra de que existe el talento en Guatemala, el cual ha explotado al máximo aquí en su país, y sin duda dejara un gran legado para la futuras generaciones.

La joya de Guatemala.


El Centro Histórico de Quetzaltenango es considerado como el más antiguo de Guatemala.

La bella cuna de la cultura se engalana con la atractiva elegancia de su Centro Histórico, la cual es considerada una de las más valiosas joyas arquitectónicas del país; esta comprende 111.94 hectáreas sin contar sus áreas y monumentos aislados, además cuenta con aproximadamente 1,800 edificaciones.

Esta exquisita joya es considerada el Centro Histórico más antiguo de Guatemala, ya que la historia del territorio que hoy ocupa el departamento de Quetzaltenango se remonta a varios siglos antes de la conquista. Así, en los Títulos de la casa de Ixquín-Nehaíb, señora del territorio de Otzayá, se lee que Quetzaltenango, era una cabeza de Calpul (reunión, conciliábulo), conocida por Nimá Amac — "Un Pueblo Muy Grande" —, todo de indios mames principales.

Entre las principales edificaciones del Centro Histórico están:

Parque a Centro América: Situado en el centro de la ciudad, y también centro de la actividad social de la misma. Siendo construido en la administración de Jorge Ubico, por el Arquitecto Rafael Pérez De León, entre los años de 1,935 a 1,942.

Catedral del Espíritu santo: Está integrada por dos estructuras: La fachada de la Parroquia del Espíritu Santo (1,535 a 1,898) y la Catedral de la Diócesis de Los Altos. Siendo la primera arrasada por los movimientos telúricos casi en su totalidad. Segunda Iglesia Católica de Quetzaltenango, fundada por el Obispo Francisco Marroquín.

Casa de la Cultura: Su construcción fue hacia el año de 1,886. En este edificio funcionan la Casa de la Cultura de Quetzaltenango, una Biblioteca, y los Museos de Arqueología, Historia y Naturaleza y el de La Marimba.

Pasaje Enríquez: Fue construido en el año de 1,900 por el Arquitecto Alberto Porta; y por el artista Luis Liutti, decorador y dibujante de los grafiti que hay en el cielo de la entrada principal y al frente.

Palacio Municipal: Este edificio es la sede del Ayuntamiento Quetzalteco y de las oficinas administrativas del municipio. Se empezó su construcción el 3 de octubre de 1,881 siendo concluida en 1,897.

Y es en edificios como estos en donde dejaron huella grandes artistas como Luis Liutti, reconocidos escultores como Agatón Boj y famosos arquitectos como el Italiano Alberto Porta y Rafael Pérez De León. Y así lograron con su buen trabajo e imaginación esculpir una de las más valiosas joyas arquitectónicas de la bella Guatemala.